martes, 26 de junio de 2007

Mi peculiar manera de amaros

Queridos hijos:

Nueva llamada de mi abogado.
Hay algo positivo, más por vosotros que por mí. Poco a poco algunas cosas que mamá dijo sobre mí (y de las que os ha contaminado) se van demostrando falsas. Ya os explicaré cuando seáis mayores, con los papeles judiciales en la mano, cómo empezó todo este desagradabilísimo tema y cómo se fue desarrollando. Mi abogado –que me cuesta un riñón- sigue planteando una batalla inteligente. El problema: va muchísimo más lento de lo que yo quisiera.
Por la parte negativa, la que más me duele en estos momentos, es que incluso ganando esta querella criminal que tengo contra mamá (y que es entre ella y yo, hijos míos, pues sé que ha sido y es en líneas generales una buena madre contra vosotros con la excepción de poneros en mi contra), pasarán fácilmente casi dos años hasta que pueda veros en mejores condiciones y más tiempo.
Yo no os quiero alejar de mamá. Todo lo contrario. Quiero que améis y que respetéis mucho a vuestra madre. No os hacéis ni idea de las muchas penalidades que ha pasado durante vuestros embarazos para traeros a este mundo. Respetadla siempre porque se entregó a vosotros. Creo que a veces los errores que ha cometido es porque tenía miedo de perderos, que estaba un poco asustada quizás.
En un foro del internet leí esto:

“Mejor luchar y perder que no haber luchado. Todo padre que ha luchado "gana" un status ante si mismo muy deseable. Y puede llevarse sorpresas (habitualmente extrajudiciales) que criar hijos en solitario es duro.”

Yo sólo quiero deciros, hijos míos. Sigo luchando cuando ya ni las fuerzas ni la economía me da para ello por vosotros. Para que pueda estar más a vuestro lado. Es una peculiar manera de manifestaros mi amor hacia vosotros. Siento, también, que como decía este hombre al que he citado, es un deber el luchar por vosotros.
Portaros bien con mamá. He sabido por alguien de fuera de la familia que últimamente no os estáis portando como deberíais ni en casa ni en el colegio.
Mis bendiciones,

Papá

No hay comentarios: