miércoles, 1 de agosto de 2007

Cambio de trabajo

Queridos hijos:

Estoy haciendo todo cuanto puedo para cambiar mi trabajo y mi ubicación física de trabajo. No os voy a decir que ha sido fácil. Primero no es fácil encontrar un trabajo mejor pagado, pero ahora estoy bastante apurado con la pensión que os debo pasar y los gastos legales. Segundo pienso en vuestro futuro. Ahora sois todavía relativamente pequeños, pero en poco tiempo tendréis que ir a la Universidad. No os podré dejar nada, porque no tengo patrimonio mío ninguno, pero sí intentaré dejaros la mejor educación posible. Y ésta es cara. Tercero, quiero un trabajo que me permita dentro de lo posible estar más cerca de vosotros, con mayor accesibilidad a vosotros.
Así que hay que cambiar de trabajo. Para mí lo más difícil ha sido renunciar a ciertas cosas de mi trabajo actual, que me encanta, pero que no está suficientemente bien pagado para las necesidades que tenemos ahora. Dice J, un amigo mío que está metido en una Asociación de Padres Separados, que las prioridades cambian. J también trabaja en algo muy parecido a lo mío. Y también a él le dificultan mucho ver a sus niños.
De manera que hay que cambiar de trabajo. Con la ayuda de la Santísima Virgen y de San José podré encontrar algo para proveer mejor por vosotros. Sé que alguien cercano a vosotros os ha dicho que yo no estaba dispuesto a hacer un sacrificio por vosotros, pero esto es mentira. Los hechos están ahí y guardo prueba de todo ello para demostrároslo en un futuro cercano. Hay algo ahora que puede caer hoy mismo o mañana, si Dios quiere. No estaría mal que cayera en la Festividad, o en la Víspera, de Nuestra Señora de los Angeles.
Os echo mucho de menos. Muchísimo. Pero en todo lo que hago y todo lo que vivo estáis vosotros. Todo es por vosotros.
Os bendigo,

Papá

No hay comentarios: